Claro de Luna


Un inicio impactante. Temor. Angustia. Y muy claro, como su título. Así es la vida de muchas mujeres amenazadas por un vil maltratador. Miguel Aguerralde Movellán nos hace sentir el latente pánico de dos mujeres, de nombre curiosamente coincidente, cuyos destinos, una aciaga noche, toman la misma dirección: el desesperado intento de sobrevivir.
     Luna Ortega, locutora de la emisora Radio 2000, trabaja en el espacio nocturno "Claro de Luna". Una existencia más bien monótona que se verá alterada de manera radical. Pañuelo de lágrimas y consuelo de frustradas voces que, a través de las ondas en la madrugada, comparten sus horas más tristes con el anhelo de un solidario consejo.
     Los tranquilos días junto a Lucas, su cariñoso cachorro West Highland White Terrier, de sosegada lectura y entretenidas películas, devienen una pesadilla. La suplicante llamada de una mujer indefensa con la respiración entrecortada, pidiendo ayuda, convierte a Luna Ortega en el blanco de una mente trastornada.      
     Lo que parecía una broma pesada resulta ser un cruel asesinato y su ejecutor, el dueño de una única obsesión: encontrar a Luna Ortega y satisfacer su sed de venganza.
 Miguel Aguerralde Movellán nos hace experimentar las diferentes sensaciones de tensión que sufre la protagonista como el temor en el oscuro y silencioso barrio de San Telmo, la ansiedad en su solitario portal de la Isleta, el temblor de sus manos al girar la llave en una resistente cerradura o el escalofrío ante la noticia del macabro hallazgo del cuerpo irreconocible de Clara Luna.
      Un atormentado presente con encuentros que parecen fortuitos como el de Darío, en un halo de paz y protección. Un secreto celosamente guardado hace más de 15 años en una caja por el marido de la víctima, Carlos. Inesperados y violentos ataques que hacen que el lector esté en constante alerta. Vigilancia policial y frecuentes visiones que dirigen a Luna al antiguo hogar familiar de la víctima, mudo testigo de un múltiple crímen. Y finalmente, arriesgada persecución automovilística con una rotunda confesión de alguien que no esperábamos .....
     ¿Broma o pesadilla? ¿Amigo o psicópata? ¿Rutina o cambio? ¿Fatal o feliz desenlace? Es mejor que lo descubra el  lector en los párrafos de esta novela negra que una vez que se empieza no puede abandonarse hasta el punto final del epílogo que, por cierto, es de los que dejan la miel en los labios.


Enhorabuena Miguel por tu primera novela "Claro de Luna" (Editorial Idea). Para mí además supone un grato recuerdo por contar con el privilegio de una dedicatoria que representa la primera firma (13 enero 2012) en la librería Barco de Papel de Playa Blanca.
Otros títulos del autor son: "Noctámbulo"  (Editorial Idea) y  "Los Ojos de Dios" (Editorial 23 Escalones).
Podéis consultar toda su trayectoria y los puntos de venta en su página Web:
 www.miguelaguerralde.com





1 comentario:

  1. Felicidades Syra por esta estupenda reseña y por las palabras sobre Barco de Papel. Un abrazo.

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"Para mi la escritura es un camino espiritual" (Rosa Montero) "Viviendo rodeados de señales, nosotros mismos somos un sistema de señales"(José Saramago) "Sólo cabe progresar cuando se piensa en grande, sólo es posible avanzar cuando se mira lejos" (Ortega y Gasset) "Concédeme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las que sí puedo y la sabiduría para establecer esta diferencia" (Epicteto) "La ingratitud es el precio al favor inmerecido" (Ignacio Manuel Altamirano) "Se viaja para contemplar con los propios ojos la ciudad apetecida y saborear en la realidad el encanto de lo soñado" (Marcel Proust) "Pero cuando nada subsiste ya de un pasado antiguo, cuando han muerto los seres y se han derrumbado las cosas, solos, más frágiles, más vivos, más inmateriales, más persistentes y fieles que nunca, el olor y el sabor perduran mucho más, y recuerdan, y aguardan, y esperan sobre las ruinas de todo, y soportan sin doblegarse en su impalpable gotita el edificio enorme del recuerdo"

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