Graduación de mi hija Marina en Cinematografía y Artes Visuales

Teatro Cofidis Alcázar 
El viernes 6 de julio tuvo lugar el acto de graduación de 200 alumnos del Centro Universitario de Artes TAI en el teatro Cofidis Alcázar de Madrid
En su organización participaron estudiantes de grados y master de Artes Escénicas, Bellas Artes, Cine, Diseño, Fotografía y Música. Algunos coordinando su desarrollo, "on/back stage", y otros con la proyección de escenas inolvidables de películas, minutos seleccionados de sus trabajos (cortos, videoclips...), acercando así al público asistente el día a día de su formación. El actor Jorge Muriel dirigió el evento.

Alumnos TAI
Durante su transcurso se vivieron momentos entrañables en los que se recordó la etapa de 4 años de convivencia (en el caso de los grados), los fuertes lazos de amistad creados y también el agradecimiento por parte del alumnado a profesores que han sido vitales en su aprendizaje.
No es de extrañar que la emotividad reinase en el ambiente, escuchando las reflexiones e interpretaciones de estudiantes con visible sensibilidad en disciplinas artísticas.

Marina (Círculo Bellas Artes)


Ellos, protagonistas de este acto, manifestaron que son muy conscientes del esfuerzo que deben asumir constantemente en la profesión elegida.

Tienen mucha razón, sin duda, al afirmar que necesitan salud para emprender su camino.
A todos les doy la enhorabuena por los logros alcanzados y les deseo mucha suerte a partir de ahora tanto en su formación futura como en su integración en el mundo laboral.

Y en especial, a mi hija Marina, graduada en "Cinematografía y Artes Visuales: Fotografía y Cámara".


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"Para mi la escritura es un camino espiritual" (Rosa Montero) "Viviendo rodeados de señales, nosotros mismos somos un sistema de señales"(José Saramago) "Sólo cabe progresar cuando se piensa en grande, sólo es posible avanzar cuando se mira lejos" (Ortega y Gasset) "Concédeme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las que sí puedo y la sabiduría para establecer esta diferencia" (Epicteto) "La ingratitud es el precio al favor inmerecido" (Ignacio Manuel Altamirano) "Se viaja para contemplar con los propios ojos la ciudad apetecida y saborear en la realidad el encanto de lo soñado" (Marcel Proust) "Pero cuando nada subsiste ya de un pasado antiguo, cuando han muerto los seres y se han derrumbado las cosas, solos, más frágiles, más vivos, más inmateriales, más persistentes y fieles que nunca, el olor y el sabor perduran mucho más, y recuerdan, y aguardan, y esperan sobre las ruinas de todo, y soportan sin doblegarse en su impalpable gotita el edificio enorme del recuerdo"

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