Camino de Letras con Syra

Recordó su etapa como director en el semanario "Pronósticos" antes de irse a residir a Las Palmas de gran Canaria con su mujer Josefina Ramírez. Allí nacieron sus seis hijos. Publica en 1953 “Diez cuentos" con ilustraciones de Manolo Millares. Ésta es la dedicatoria:

"A mi madre, ya vieja, y a la madre de mis hijos, estos cachos de vidas de hijos"

Los cuentos son:

Pág. 21/Cuento IV

• Don Pedro y su anillo.
• El mamoncito.
• El solterón.
• Los tres oficios de Santiago "el ganga".
• Alma anacrónica.
• El loquito.
• Las rarezas de Pancho Santana.
• Espectro maldito.
• La botella.
• Joao Cabreiro, marinero, víctima.

Portada

Tras una década emigró a Bélgica, un periodo muy duro en el que trabajaría en las minas y quedaría grabado para siempre en su memoria y en las secuelas de su organismo.
Fundó y dirigió la revista “Volcán” durante 5 años hasta 1968, fecha en la que regresa a Lanzarote. 

En la Villa de Teguise escribirá incansablemente. Destacan un conjunto de narraciones, fruto de sus vivencias en Bélgica. Así nace “Nosotros, los emigrantes” (1970) con ilustraciones de Julio Viera y prólogo de Pedro Santonja. Dedicado a "Antonio Izquierdo, más que artista, Mecenas de artistas, de poetas desgarrados, de músicos sin partituras ni instrumentos, de pintores malditos ..."

Pág. 9

Los protagonistas son la mayoría personajes reales que como él  soñaban con la esperanza de un futuro mejor. Con humor e ironía nos presenta las circunstancias adversas de su entorno (miseria, hambre, soledad) convirtiendo casi la tragedia en comedia. Su preocupación y compasión por el ser humano late en cada uno de sus capítulos. Francisco Delgado destacó sus crónicas "Lanzarote y yo" (1972), "Desde mi cráter", "Crónicas isleñas" (1978), publicaciones de cuentos en el semanario "Lancelot" y sus inolvidables tertulias en la Tienda de Maximiliano.

A continuación se invitó al público asistente a efectuar una lectura en voz alta. Uno de los miembros del club de lectura de la Biblioteca Insular, Eva, eligió a un autor argentino, Cornalo Nalé Roxlo (1898-1971). Los recuerdos expresados por Fefo García (José García Corujo) en relación a la personalidad arrolladora del homenajeado y los acordes de su timple se mezclaron con el último deseo de Leandro Perdomo en 1993:

 “Ahora que ya no espero nada de la vida, encontraré algo en la muerte”